Explicación de los Trastornos del Despertar del sueño No-REM: el sonambulismo y los terrores nocturnos en niños
A continuación hablaremos sobre las características más importantes para conocer los terrores nocturnos en niños, así como el sonambulismo. Con ello podréis aprender las características más importantes de cada trastorno y tener una aproximación clínica sobre que son los Terrores Nocturnos y que es el Sonambulismo.
Nos adentramos en un espectro frecuente pero no lo suficientemente conocido, los Trastornos del despertar del sueño No-REM. Aparentemente cuesta entender a qué nos referimos: ¿Trastornos del despertar?, ¿No-REM?. Por eso primeramente queremos ofrecerte una pequeña explicación para contextualizar de qué estamos hablando.
El ciclo del sueño tiene 2 fases, el sueño REM (o sueño paradójico) y el sueño No-REM (o sueño de ondas lentas). Ambos tienen una duración de 90 minutos aproximadamente y tienen características fisiológicas y conductuales muy diferentes. En el presente apartado les explicamos lo que puede suceder en la fase No-REM (el sonambulismo y los terrores nocturnos); mientra que en el apartado de «Pesadillas» estamos hablando de lo que puede suceder en la fase REM.
A continuación te expondremos algunas características típicas del sonambulismo y de los terrores nocturnos, dos fenómenos diferentes, y que te permitirá tener una información clínica y empírica sobre ambos fenómenos:
Que es el Sonambulismo (en niños)
¿Has podido observar alguna vez a alguien que padece sonambulismo? Probablemente habrás visto que se sienta en la cama, mira alrededor suyo, se tapa con la sábana… Estas son conductas más simples, las que se dan con mayor frecuencia, pero también puede ocurrir otras de más complejas, como por ejemplo que se meta en el armario o salga fuera de la habitación o, incluso, fuera de la casa. Otras conductas típicas que pueden ocurrir son el uso del baño, ir a la cocina a comer o hablar en voz alta. Estas conductas rutinarias no son tan frecuentes, pero sí que son igualmente importante.
En muchos casos se han de tomar medidas de seguridad para prevenir que los niños o adultos con sonambulismo lleven a cabo conductas complejas que pongan en peligro su seguridad, o la de los demás. Por ejemplo, cerrar la puerta de casa con llave, poner un pestillo en la cocina…
Estos episodios suelen durar desde varios minutos hasta media hora y pueden iniciarse con confusión.
Al igual que en otros trastornos, aquí también encontramos diferentes formas de sonambulismo, y es importante identificar si en tu paciente o familiar se dan alguna de estas formas:
- El primer subtipo, más frecuente en mujeres, es el de ingesta de alimentos, en el que durante la noche, con una mayor o menor conciencia, irá a la cocina y no podrá evitar comer todo aquello que se encuentre.
- El segundo subtipo, más frecuente en el género masculino, es la sexsomnia, pudiendo ir desde la masturbación, las caricias y los tocamientos a las relaciones sexuales.
Si deseas tener más información sobre que es el sonambulismo puedes visitar también los criterios diagnósticos del DSM 5.
Que son los terrores nocturnos (en niños)
¿Has podido observar alguna vez los terrores nocturnos en niños? Durante un episodio de los terrores nocturnos (en niños y en adultos), es típico que la persona se siente súbitamente en la cama gritando o llorando, con expresión de terror y síntomas de ansiedad intensa.
Estos episodios normalmente duran entre 1 y 10 minutos, por lo que se tratan de episodios breves pero muy intensos.
Ante esta situación la activación autonómica (sudoración, los latidos del corazón…) es muy elevada y el miedo que sienten es muy intenso.
Si durante un episodio de terror nocturno has intentado despertar, por ejemplo, a un niño con terrores nocturnos para «liberarlo» te habrás fijado que los intentos son en vano, puesto que la dificultad para despertarlo es elevada y, en el caso de conseguirlo, el recuerdo del episodio será mínimo o ausente (como mucho recordará algunos fragmentos o imágenes simples).
Durante el episodio, a raíz del miedo y la ansiedad, es probable que el niño con terror nocturno sienta una compulsión por escapar. En estos casos, igual que explicábamos anteriormente en el sonambulismo, será muy importante tomar medidas de precaución.
¿Cuántas veces sucede?, ¿Cada vez que se duerma el niño va a sufrir de esta forma?, ¿Cómo podemos controlar cuándo y dónde?… Estas y otras son algunas de las preguntas que quizás te hayan venido a la cabeza al detectar que, de vez en cuando, tu hijo, familiar o paciente sufre estos episodios.
Pues bien, aunque desgraciadamente no podemos controlar todo lo que nos gustaría, sí que es importante saber que normalmente sólo ocurre un episodio durante la noche siendo más frecuente durante las noches y menos probable durante las siestas.
Si deseas tener más información sobre que son los terrores nocturnos puedes visitar también los criterios DSM 5 para los Terrores Nocturnos.
Algunas características son compartidas entre los terrores nocturnos y el sonambulismo, por esto se incluyen, ambos trastornos, dentro del espectro TRASTORNOS DEL DESPERTAR DEL SUEÑO NO-REM.
Terrores nocturnos y sonambulismo: tratamientos eficaces
Aunque desgraciadamente no disponemos de tratamientos con la máxima eficacia para abordar los terrores nocturnos y el sonambulismo, sí hay algunos métodos que tienen cierto nivel de evidencia. Éstos son:
Despertares programados
Se registra cuándo aparecen los episodios (durante 2 semanas aproximadamente) y después se despierta al paciente cada noche entre 15-30 minutos antes del episodio.
Hipnosis y Relajación
Se utilizan técnicas basadas en la autosugestión o bien técnicas de relajación de la Relajación Muscular de Jacobson, ambas con una duración aproximada de 20 minutos.
Terrores nocturnos y sonambulismo: la medicación
Los fármacos no suelen utilizarse para tratar estos trastornos ya que normalmente remiten de forma espontánea.
Ahora bien, en los casos más graves se han utilizado benzodiazepinas y antidepresivos tricíclicos (como imipramina), ambos disminuyendo la probabilidad de aparición de dichos episodios.
Recursos de Interés sobre el Sonambulismo y los Terrores Nocturnos en niños
Síntomas característicos de los Terrores Nocturnos
Los terrores nocturnos tienen distintas manifestaciones, entre las cuales se encuentran:
- Gritos
- Lloros
- Reacciones de terror
- Ansiedad
- Compulsión por escapar
Número de apariciones de los Terrores Nocturnos
De los terrores nocturnos, desgraciadamente, no podemos controlar todo lo que nos gustaría su ocurrencia o frecuencia, pero sí que es importante saber que normalmente sólo ocurre un episodio durante la noche y es muy poco probable su aparición durante las siestas.
Cuando aparece el Sonambulismo
Para saber cuándo aparece el sonambulismo, hay que empezar por entender las fases del sueño.
El ciclo del sueño tiene 2 etapas, el sueño REM (o sueño paradójico) y el sueño No-REM (o sueño de ondas lentas / sueño profundo). Ambas tienen una duración de 90 minutos aproximadamente y tienen características fisiológicas y conductuales muy diferentes.
El sonambulismo y los terrores nocturnos forman parte de lo que se denomina “Trastornos del despertar del sueño NO-REM“, suceden más propiamente en las fases 3 y 4 del sueño, es decir, en el “sueño profundo”; mientras que las pesadillas son más frecuentes en la fase REM.
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